Luces y sombras fuertes en fotografía

Sucede que hay momentos que tenemos fuertes luces y sombres en los objetos a fotografiar y dificultan obtener una buena imagen. Nuestra cámara en forma automática promedia y elige la apertura de diafragma que estima mas conveniente. En el mismo sentido juegan la velocidad de obturación y la sensibilidad medidas en ASA para captar la luz. Estos dos últimos factores los podemos elegir previamente u optar por el automatismo. Sucede también que sí apuntamos a las luces para elegir la apertura, las sombras saldrán con menor información o sí elegimos una apertura para las sombras, las luces quedaran sobreexpuestas sin información. 

Lo fotógrafos avezados saben y recomiendan que para el posterior proceso de la imagen es conveniente elegir la apertura de diafragma para las luces y recuperar la información de las sombras. Otra opción es trabajar pensando procesar luego en HDR (en inglés High Dynamic Range, que significa alta gama dinámica). Para ello toman dos o tres tomas con aperturas diferentes en secuencia. El problema es que la imágenes son distintas en objetos en movimiento por el intervalo de tiempo entre fotos y/o en los objetos estáticos se recomienda usar trípode para evitar pequeñas trepidaciones.

Si les resulta complicado lo anterior, no lo lean ni traten de entender, pero sepan que para obtener una fotografía de calidad se deben conocer algunos detalles técnicos bastante engorrosos y molestos de aprender. Sepan que es dificil sacar buenas fotografías y encuentren placer y disfruten del uso del celular. Las cámaras de los modernos teléfonos inteligentes  son muy buenas y cumplen perfectamente la función de la fotografía en cuanto a tener recuerdos.  

Si no les resulta complicado, felicitaciones, seguramente están en condiciones de apreciar buenas fotografías en mayor profundidad. En mi caso, recuerdo empezar a apreciar la pintura a partir de que me puse a pintar. Hoy no salgo de mi asombro y reconozco, dentro de mis limitaciones y conocimientos, la maestría de tantos maravillosos pintores, sus obras y disfruto con mayor plenitud de ellas. 

Leyendo lo escrito hasta ahora, les comento que siento haberlo realizado con una cuota de soberbia y no fue mi intención. Claro, a veces me duele cuando ante la presencia de una buena imagen, me preguntan: ¿Qué cámara tenés? , atribuyendo a la cámara todos los méritos. Por otro lado, y creo que es mi verdadero objetivo, transmitir que detrás del arte hay horas de trabajo, estudio, sacrificio, experiencia que vale la pena reconocer. Uno ve distinto, oye distinto a los grandes músicos, lee distinto cuando sabe el “detrás” invisible de la historia de un artista. Además que, tener conciencia de nuestra ignorancia nos ayuda a crecer en el camino que adoptemos. Nunca hay que creérsela si queremos avanzar. 

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