La ventilación era escasa esa mañana de junio de 1633; las gruesas paredes no permitían el intercambio de aire con el exterior. Los muebles eran pesados y trabajados. Cómodos sillones de cálidas panas bordo acompañaban el ambiente. Las ventanas habían estado cerradas por el feriado. A través de ellas pasaba un tenue rayo de luz como neblina blanca. Juan Sinombre y Pedro Olvidado hablaban entre ellos, eran funcionarios jerárquicos que disfrutaban los beneficios de pertenecer a la corte.
— Este tipo está loco, no te imaginás en que lío nos mete— Dijo Juan.
— Dime: ¿cuál es la relación que lo une a Copérnico?— le repreguntó Pedro.
—No lo sé, pero imagina: si avalamos sus ideas, el Papa nos defenestra. Con que cara nos vamos a presentar ante él.
— No lo sé, no puedo pensarlo, pero entiendo que no le gustaría; desde Aristóteles estamos afirmando que el centro político de la tierra está en la tierra, precisamente en Roma.
— No tolerarás a Galilei, es un astrónomo sin relevancia. Muchos dicen que es un viejo loco, un bohemio, un fracasado— sugirió Juan.
— ¿Te parece? — preguntó Pedro y luego de un largo silencio, sugirió:
—Sí, reunámonos con los amigos del santo grupo. Ellos son más papistas que el papa. Además, dependen de nuestros fondos. Vamos para adelante, pero, no lo matemos y que viva. Sus ideas pronto serán olvidadas—
Fue la conversación imaginaria que construí –hoy, 22 de junio de 2020– mientras pienso que el nido de la serpiente todavía nos habita. La historia se repite. Nadie está exento de ella cuando ignora la verdad y tiene poder.
La anterior ficción surgió porque minutos antes había leído el siguiente artículo en el diario “La Nación” :
A 387 años de la condena a Galileo Galilei por demostrar que la Tierra gira alrededor del Sol

El 22 de junio de 1633 el astrónomo y matemático italiano Galileo Galilei era condenado por la Inquisición católica Romana por su teoría que corroboraba que la Tierra y los planetas giran alrededor del Sol , destronando la teoría geocéntrica aristotélica que afirmaba que el centro del Universo era la Tierra.
En 1610, Galileo publicó su Sidereus Nuncius (Mensajero de las Estrellas), describiendo las observaciones sorprendentes que hizo con un telescopio nuevo, entre ellos, las lunas galileanas de Júpiter. Con estas observaciones y otras adicionales que siguieron, como las fases de Venus, Galileo promueve la teoría heliocéntrica de Nicolás Copérnico . Los descubrimientos de Galileo estuvieron conocidos con oposición dentro de la Iglesia Católica, y en 1616 la Inquisición declaró el heliocentrismo de ser «formalmente heretical.

Luego de ser enjuiciado, Galileo fue declarado culpable, y la sentencia de la Inquisición, emitida el 22 de junio de 1633, constaba de tres partes: Galileo fue encontrado «vehementemente sospechoso de herejía», por haber sostenido las opiniones de que el Sol yace inmóvil en el centro del universo, que la Tierra no está en su centro y se mueve, y que uno puede sostener y defender una opinión como probable.
Galileo fue sentenciado a encarcelamiento por la Inquisición. Al día siguiente, se le conmutó arresto domiciliario para el resto de su vida . Su obra fue prohibida, y en una acción no anunciada en el juicio, se censuró cualquier tipo de producción intelectual, incluidas la que pudiera escribir en el futuro.
El 31 de octubre de 1992 , ante la Academia Pontificia de la Ciencia, el entonces Papa Juan Pablo II declaró oficialmente que Galileo Galilei era inocente de la acusación por la que había sido condenado en el año 1633.
Fuente de la noticia:
Nota del diario: “La Nación”, Buenos Aires, 22 de junio del 2020.
https://www.lanacion.com.ar/lifestyle/a-387-anos-condena-galileo-galilei-demostrar-nid2382500
Estimado José te recomiendo la lectura de «Galileo Galilei» de Jean-Yves Boriaud de Editorial El Ateneo de 2018, editado originalmente en 2010 por Editions Perrin.
Además hay un libro de ciencia ficción de Kim Stanley Robinson (autor de los famosísimos libros Marte Rojo, Marte Azul y Marte Verde y otros) «Galileo’ s Dream» donde Galileo es guiado por humanos del futuro que retornan al pasado mediante el enlace cuántico con el objeto de asegurar que las ideas de Galileo se hagan tangibles pero evitando que la Inquisición lo condene a la hoguera por hereje. Bueno,no te lo voy a espoliar pero se va tejiendo la vida de Galileo y explicándola por la acción de estos agentes del futuro.
Un abrazo.
Carlos
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