Para muchos de nosotros, descendientes de italianos, la pasta tiene un atractivo especial. En particular tengo predilección por la pasta seca, sin rellenos. Unos spaghetti, foratti, fetuccini,o penne rigate acompañados por una salsa es un plato simple, rápido y rico.
Los secretos, si los hay, es el tiempo de cocción. Al dente son inigualables. Simplemente acompañados de manteca y queso rayado son, por sí, apetitosos.
Pero bueno, hay otras salsas distintas y/o menos conocidas, que pueden renovar nuestro placer. Les comento una que tomé de un programa de cocina de Dolli Irigoyen. A continuación la receta que me permití hacer y recrear.
Receta
Pelar una cebolla mediana y cortar muy pequeño. Pelar unos tomates comunes, tres o cuatro esta bien, cortar en gajos, sacarle la piel y las semillas. Cortar en cubitos chicos. Pelar cuatro dientes de ajo, sacarle la rabia, y filetear pequeño.
Poner una nuez de manteca en la sartén con aceite de oliva para que no se queme. Agregar la cebolla, el ajo fileteado y cocinar hasta transparentar. Agregar el tomate. Cocinar unos minutos más.
Luego, agregar una lata de atún en aceite. Pueden poner dos latas; una con aceite y la otra al natural. Siempre de buena marca. Otra variante es agregar unos filetes de anchoas bien desmenuzados.
Cocinar, no mucho, y agregar al final el contenido de un frasco chico de alcaparras.
No olvidar el dente de la pasta. Una vez que este a punto, retirar del fuego, colar y agregar a la salsa. Terminar sarteneando los fideos y la salsa juntos unos poco más.
Agregar un chorro de aceite de oliva, y queso de rayar si fuera el gusto.
Disfrutar.